Y cada historia es especial
Esta historia además es muy entrañable, comienza en nuestro barrio y la protagonista es una señora a la que pudimos ayudar. Porque cada vez que una persona entra en DEKitchen, la escuchamos y más allá de las palabras sabemos entender la necesidad.
Hace unos meses una vecina de nuestro barrio nos vino a consultar, desesperada por arreglar su vieja instalación en la cocina que goteaba sin parar. Decidida al ver nuestros escaparates con cocinas nuevas pensó que le podíamos ayudar y así fue.
En este vídeo ella lo cuenta: cuatro fontaneros habían acudido antes sin éxito, hasta que llegamos nosotros.
Luego entusiasmada con el trato, se decidió a dar un paso más. Así que ese mismo día que nuestro compañero de instalaciones se acercó para solucionar, ella ya había tomado una decisión que no se hizo esperar. «Ahora arreglamos el fregadero, pero yo quiero una cocina nueva de diseño». Tenía claro esta encantadora vecina que era «momento de renovar».
Sin esperarlo nos llegaba en poco tiempo su solicitud formal. Así que la volvimos a escuchar porque con entusiasmo nos guiaba lo que le gustaría en su hogar. Medimos, ideamos, proyectamos y con ilusión todo el equipo nos empeñamos en ofrecerle una cocina actual a su medida.
De un desatasco pasamos a una reforma integral de su cocina. Elegir con ella el mobiliario y equipamiento ha sido toda una experiencia. Para los muebles optamos por frentes de puerta modelo Lux Alto Brillo de nuestro fabricante alemán, Nolte. La encimera es de Neolith, en concreto el modelo Zaha Stone. Por último, los suelos y alicatados de las paredes son de Saloni.
El objetivo además de trabajar con agilidad, para que en poco tiempo tuviera su cocina reformada, ha sido proporcionarle la mayor comodidad posible. Por esto, dispusimos sistemas de apertura y extracción que permitan buscar y disponer de los enseres con mucha facilidad. Evitamos así que las personas mayores tengan que lastimarse con esquineras complicadas o estantes inalcanzables.
Este es el resultado de la historia y de nuestro encargo tan peculiar. Nos satisface poder ayudar y alimentar nuevas ilusiones, y si son con personas mayores, más.
Y tú, ¿te animas a reformar? ¿Cuál es tu historia? ¿La compartimos?
